La prueba que puso a prueba a la estupidez humana

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Sábado 21 de Marzo de 2020

Si ésta no es la prueba que nos pone la vida para reaccionar y entender que nos está matando el capitalismo -así de trillado, así de descarado- pasa por nuestras narices, riéndose, y no queremos darnos cuenta, pues es bastante cómoda una cuarentena iluminada, haciendo lo que nunca hemos hecho: asumiendo roles de cuidado y autocuidado. Pero si sigue en clave capitalista y patriarcal, si no reconoce que la lucha de clases sigue en la calle, los pobres seguirán muriendo todos los días, sin ser contabilizados, sin ser noticia, ni las mujeres encerradas con su agresor. Ahora, esas personas ni siquiera son consideradas en las medidas que se toman en los estados de excepción. ¿En qué toque de queda nos avisarán que murió un pobre o que hubo un feminicidio? No están en nuestras vidas, entonces en ninguna. Lo importante es encerrarse, y empezamos a aplaudir el circo que pasa nuevamente por nuestras narices: el bloqueo del aeropuerto en el manso Guayas, en el que la autoridad -de un grito- cometió delitos de lesa humanidad según la Fiscalía General del Estado, equivocándose de tipo penal, pues ahora resulta que son delitos contra el derecho internacional humanitario; y la Ministra de Gobierno condenando por televisión a los indígenas que buscan resguardarse como todxs, cada uno a su manera -según ella, eso sí es terrorismo- y pasamos la página al día siguiente para seguir sobreviviendo el encierro.

Campañas para que la gente no abandone a sus mascotas en la calle empiezan a circular, ataques a supermercados por nuestro miedo y voracidad, no a mercados; allá la gente sigue trabajando, pero nadie va, allá no existen suficientes mascarillas.

El peligro no es que te enfermes, el problema es que te morirás porque no consiguen una camilla más en el hospital, y eso nos dice el malgobierno en nuestras caras, y también en nuestras caras destinó más presupuesto en seguridad, mientras el sistema de salud hoy tambalea.

El surgimiento de más plataformas virtuales es diario, para mantenerte enajenado como un prosumidor adicto a generar y replicar información basura, pero aparte de eso también resulta ser una herramienta útil. Ahora se reconoce que las noticias y los medios tradicionales son un mal chiste, un insulto a la inteligencia, lo cual replantea la concepción que menosprecia a los medios alternativos de comunicación, pues uno mismo se convierte en comunicador desde las distintas formas de resistencia. Y así es como la rutina bien organizada por el capitalismo empieza a parar y descoloca a quienes comienzan a escuchar a la Tierra, y descubren que los sonidos de la naturaleza están aquí todos los días a todas horas, permitiendo una comprensión más profunda: que también somos naturaleza…nos aferramos a la vida, cada uno a su manera y seguimos, ya no resistiendo sino transformando.

Pero muchos dirán que estos son otros delirios de esxs trasnochadxs de izquierda.

 

Referencia fotográfica:

www.20minutos.es

 

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