A la voz del carnaval todo el mundo se levanta

Entre siete colinas y el imponente Chimborazo se encuentra la ciudad de Guaranda, capital de la provincia Bolívar, lugar que cada año se viste de fiesta para celebrar el carnaval, época de desbordante alegría y color.

Entre los principales elementos del carnaval está el agua como símbolo de purificación y vida, esencial para iniciar la época de la cosecha; el polvo para eliminar las brechas sociales, económicas y culturales y la danza, que se relaciona con la fuerza del sol y el desprendimiento de los malos espíritus. En este sentido, aquella fiesta popular viene cargada de un profundo significado detrás de cada baile, de cada máscara, de cada copla, ya que en su repertorio se evidencia la mezcla de culturas, en especial la de la indígena e hispana.

Por una parte, el carnaval se nutre del Pawkar Raymi o fiesta del florecimiento, donde la mujer participa como principal vínculo entre la tierra y los alimentos. Cabe recalcar, que éste es considerado como un momento clave para la transmisión de saberes ancestrales, ya que la Pachamama está dando vida. Por otro lado se incluye un tinte religioso y político, provenientes de la cultura hispana, donde se retoma la idea de elegir a la reina del lugar como personaje de profunda admiración popular. Esta celebración a puertas abiertas, permite que surjan artivismos a la voz del carnaval. Además, como expresión de motivación y euforia colectiva, esta fiesta permite romper ciertos estigmas y por un momento se invierte la rutina para simplemente celebrar y agradecer.

Nuestros cuerpos, los que tenemos, los que construimos, la tierra viva y el agua pura, nos dan la fuerza que nos permite bailar la vida.